¿Conoces el Espolón Calcáneo? Causas y tratamientos.
El espolón calcáneo es un tumor benigno de hueso, un recrecimiento de tejido óseo en la parte inferior del talón, en el hueso calcáneo y que tiene forma de lanza.
Causas del espolón calcáneo
Entre las causas más comunes están el envejecimiento, un sobrepeso excesivo que va a provocar una distención continuada de la fascia plantar, existencia de enfermedades reumáticas, alteraciones posturales o alteraciones de la marcha y también una excesiva actividad física. Se debe tener claro que, aunque en muchos casos de dan de manera simultanea con la fascitis plantar, no estamos hablando de la misma patología.
Síntomas
El síntoma más común es la presencia de dolor justo en el talón. Lo que lo diferencia de la fascitis plantar es que en la fascitis el dolor es mas difuso a todo lo largo de la planta del pie, el dolor puede ser muy intenso obligando incluso a cojear y aparece de manera intensa por la mañana, después de un periodo de descanso o al estar mucho tiempo de pie. Por otro lado, el tipo de calzado es muy importante a la hora de que se intensifiquen los síntomas, destacando en este negativo aspecto los zapatos de suela dura, el habitual calzado de seguridad laboral y los zapatos de tacón.
Tratamiento del espolón calcáneo
El tratamiento del espolón calcáneo consiste en dos variantes, por un lado, la corrección de las alteraciones posturales o de la marcha mediante medidas higiénicas posturales o de la deambulación y por otro lado el tratamiento sintomático del dolor con tandas más o menos largas con antiinflamatorios esteroideos (AINES).
La fisioterapia conservadora va a incluir el tratamiento mediante masoterapia, estiramientos de fascia plantar, gemelos, soleo e isquiotibiales, crioterapia, movilización del sistema nervioso, electroterapia analgésica y programa específicos de ejercicios.
Por otro lado, nos encontramos con diversos tratamientos fisioterápicos mas agresivos los cuales van a mejorar los síntomas mas eficazmente como son las ondas de choques que rompen los acúmulos de microcristales de calcio y ácido úrico provocadas por esta lesión.
Hay que tener en cuenta que la fisioterapia no acaba con el espolón sino con sus síntomas. Cuando a pesar del trabajo del fisioterapeuta el paciente continua con los síntomas se acudirá a la cirugía para intentar disminuir la tensión provocada en el talón.
